Un ejemplo, un modelo a seguir. A veces no entendemos los designios de Dios, pero confiamos en su sabidur铆a infinita. Hoy rogamos que tu partida al cielo sea ese milagro que Colombia necesita: un llamado a la unidad, al regreso de los valores que nos hacen humanos 鈥攑roteger la vida, vivir con honestidad y caminar con humildad. Que tu luz nos inspire a ser mejores.